«Los Monegros ha demostrado ser una potencia y un ejemplo de buena combinación entre la agricultura y la ganadería y, aunque queda mucho por hacer, en esta comarca el sector primario ha permitido que se fije la población». Así lo señaló el vicepresidente de ASAJA Huesca y responsable del sector porcino, José María Orús, justo antes de ahondar en las conclusiones que dejó la XVIII Jornada sobre Ganado Porcino organizada en Femoga.
Desde Sariñena, la cabecera de la comarca monegrina, ASAJA, junto con ganaderos, agricultores, miembros de la administración, OCAS, ADSS, veterinarios, ingenieros, empresas e industria, analizaron el pasado 23 de septiembre los principales retos a los que se enfrenta la ganadería porcina, en un debate abierto y participativo.
Según detalló Orús, se abordaron los temas más controvertidos del sector, así como los puntos de más dificultad para sus profesionales. Los asistentes coincidieron en que «lo más importante es cumplir con los parámetros de trazabilidad: medicamento y alimento». Ahora bien, «el problema surge cuando se dan cambios en la normativa, que se hacen desde Europa de forma radical y sin diálogo».
El inmediato cumplimiento de las normativas europeas complica el trabajo de los ganaderos porcinos y, en muchos casos, del bienestar animal, según explicó Orús. El medioambiente, por su parte, que ha generado un amplio debate social, está siendo abordado también desde la agricultura y la ganadería. De hecho, en su opinión, y aunque todavía queda camino por recorrer, «se está avanzando a pasos agigantados en materia medioambiental», a través de diferentes técnicas que ya están en uso y que permiten paliar los efectos de la actividad ganadera. Ahora bien, «la falta de tiempo y de ayudas económicas ralentiza el progreso en esta área», puntualizó.
Por ello, y dentro de la jornada organizada, se dio prioridad a la importancia de la investigación e innovación en el sector porcino. Y, a su vez, solicitaron más apoyo institucional y diálogo con Europa.