¿Qué es la Escuela Detis? ¿Qué puede hacer por ti y por tu pueblo? ¿Cómo puede ayudar al desarrollo y futuro de Los Monegros? ¿A quién se dirige? ¿Cuáles son sus siguientes acciones? A todas estas preguntas ha respondido este miércoles el acto de inauguración de este innovador proyecto, que ha tenido lugar en la Casa Mompeón de Perdiguera, donde está situada su sede física.
Las primeras claves las ha dado el alcalde de Perdiguera, José Manuel Usón, recordando que se trata de la primera escuela de emprendimiento de Los Monegros. DETIS son las siglas de Escuela de Desarrollo, Emprendimiento, Transformación e Innovación Social. La iniciativa está promovida por el Ayuntamiento de Perdiguera y aprobada por la Fundación Aragón Emprende, al amparo de la convocatoria de subvenciones para proyectos de transformación territorial y lucha contra la despoblación a través del programa Erea+.
En su primera fase, tal y como ha detallado, sus acciones han estado especialmente dirigidas a mujeres del mundo rural, que quieran vivir y desarrollarse plenamente en sus pueblos, «porque son ellas las que más lo demandan y las que más participan y porque invertir en el desarrollo de una mujer es contribuir al desarrollo de su entorno», ha indicado.
El primer edil también ha recordado que a la sede física del proyecto se suma una ventana virtual, con el fin de abrirse al conjunto del territorio e, incluso, a otras zonas afines, a nivel nacional o internacional, tendiendo su mano a cualquier persona, colectivo o entidad con ganas de emprender en el medio rural a nivel económico, social o político, independientemente de la fase en la que se encuentre su proyecto. «El objetivo es que esta escuela les sirva para desarrollar sus habilidades y talentos, con el fin de alcanzar sus proyectos personales y profesionales, a través de una comunidad de apoyo, que detecte las necesidades propias y públicas, participe activamente en el territorio y elabore un plan estratégico común», ha explicado Usón.
¿Y por qué? A esta otra cuestión ha respondido la coordinadora del proyecto, Ana Marcén, que ha palpado la realidad del medio rural en primera persona, donde el futuro se vislumbra complicado sin la existencia de una comunidad fuerte y activa, que haga crecer el número de emprendedores y además, sea capaz de sostener y aupar sus proyectos. Y no solo los económicos.
De hecho, y como ejemplo, por su implicación en asociaciones o colectivos, ha comprobado que la soledad y el sobresfuerzo acaban por agotar a las personas que tiran del carro y con ellas, se pierden iniciativas, oportunidades y vida en los pueblos. «Hay que formar y desarrollar las habilidades de esas personas, ofrecerles ayuda y el respaldo de toda una comunidad», ha dicho.
Para lograr vencer objeciones, desmontar mitos y cambiar tendencias, Marcén ha dicho que es imprescindible incluir el desarrollo personal en la filosofía de la Escuela Detis. «No se trata solo de que la gente sepa impulsar y desarrollar proyectos sino que sepa además gestionar su vida, disfrutando de su vida social y cultural y de las bondades de su entorno más cercano», ha subrayado.
«Yo he invertido mucho tiempo, dinero y energía en estar hoy aquí, y en no sentirme loca ni rara, y quiero celebrar que las entidades e instituciones implicadas nos brinden la oportunidad de desarrollar este proyecto desde nuestro territorio. Invertimos en equipamientos, ocio, cultura… ¿y si invertimos en esas personas que quieren cambiar nuestros pueblos?», ha concluido.
Más de 60 acciones
A lo largo de estos meses, y antes de su inauguración oficial, la Escuela Detis ha desarrollado ya numerosas acciones, dirigidas a realizar un diagnóstico de la situación y estrechar lazos con su comunidad, tanto física como virtual. En total, ha desarrollado 68 acciones.
Dentro de ellas, y según ha detallado Berta Murillo, colaboradora del proyecto, han trabajado como varias entidades locales de Perdiguera así como con diversos grupos de población. En concreto, han llevado a cabo círculos de transformación con mujeres de varias edades y con grupos de jóvenes e, incluso, los vecinos de la localidad han creado una comisión intergeneracional e interdisciplinar, que ya cuenta con 16 participantes y que tiene como reto elaborar un plan de futuro para su pueblo.
Durante esta primera etapa del proyecto, la inspiración y en especial, el testimonio de otros emprendedores y emprendedoras han jugado un papel destacado, con el fin de alentar a otros desde el ejemplo y, al mismo tiempo, desmontar creencias y mitos. Para ello, han desarrollado una docena de entrevistas, con emprendedores y emprendedoras, responsables de diferentes proyectos ligados al desarrollo del medio rural e integrantes de las entidades implicadas en la Escuela Detis.
Precisamente, dos de las emprendedoras entrevistadas, Anais Isarre, con su escuela de la felicidad, y la periodista Patricia Puértolas, fundadora del periódico digital Desde Monegros, han compartido este miércoles una mesa de experiencias junto a la concejala de Educación del Ayuntamiento de Perdiguera, Begoña Gascón.
También ellas han respondido a la utilidad que tiene la formación y el apoyo encontrado a través de la tutela de Ana Marcén, toda una emprendedora por definición, al haber impulsado y desarrollado la panadería Economonegros, que tiene su sede en Leciñena, y ahora, la Escuela Galanicas, con una filosofía muy similar a la Escuela Detis.
El acto, que ha llenado la sala de la Casa Mompeón, ha sido cerrado por la Directora General de Pymes y Autónomos del Gobierno de Aragón, Ana Sanz Campos, que se mostró satisfecha al ver el desarrollo de proyectos que surgen en el medio rural, con el ánimo de transformarlo y darle vida. También se felicitó por la vinculación de la iniciativa con el mundo digital, lo que permite amplificar su filosofía y sus acciones.
La próxima tendrá lugar el siguiente jueves, 25 de abril, con la implicación de aquellos que ya están emprendiendo, es decir, ayuntamientos, jóvenes, asociaciones y emprendedores. Ahora bien, y tras su presentación oficial, su agenda queda abierta a las propuestas y participación de cualquier persona o entidad. Y es que «Escuela Detis no es una escuela obligatoria, pero sí muy necesaria, donde todos y todas podemos aportar».