Lavilla recibiendo el reconocimiento.
Miguel Lavilla fue promotor del Instituto de Estudios Sijenenses entre 1975 y el 2000. Designado por el Ayuntamiento, aceptó su cargo con entusiasmo y trabajó incansablemente durante 25 años por la institución. El domingo, Villanueva de Sijena quiso agradecer su implicación realizándole un homenaje. El Instituto de Estudios Sijenenses ha jugado un papel fundamental en la difusión de la figura de Miguel Servet, y Lavilla se mostró agradecido por este reconocimiento en un acto que, en sus palabras, «forma parte de mi corazón ya en lo más profundo».
Lavilla, que ha estado toda su vida dedicado a la administración local, recuerda los principales objetivos del instituto en sus años de trabajo. «El estudio y la divulgación de la figura de Miguel Servet y la preservación del patrimonio del Monasterio de Sijena», comenta. A lo largo de su vida, Servet abordó temas tan variados como la filosofía, la astronomía y la teología y, como explica Lavilla, «aunque su figura es reconocida en círculos académicos, Miguel Servet sigue siendo el gran desconocido». Según él, es necesario «continuar trabajando para dar a conocer su legado, del cual Aragón, España y, especialmente Villanueva de Sijena, se sienten profundamente orgullosos».
De sus años en activo, entre los logros más significativos del instituto Lavilla destaca «la declaración de la casa natal de Servet como monumento histórico». También menciona «la conmemoración del octavo centenario del Monasterio de Sijena, durante la cual Villanueva de Sijena fue declarada capital, el día de Aragón, por un día».
Aunque Lavilla dejó su cargo en el año 2000, sigue vinculado al instituto y al pueblo que tanto aprecia. Reside en Villanueva de Sijena junto a su esposa y, aunque ahora está jubilado, mantiene un fuerte apego hacia el instituto y sigue de cerca sus actividades.
Alberto García Mir, director del instituto, procedió a la entrega de la Preguera 2023. El galardón, que antes era un impuesto que controlaba y cobraba la priora del monasterio a través de los bailes, ahora es un reconocimiento a la labor, el esfuerzo y el trabajo en beneficio de la institución y la cultura sijenense, demoninado Preguera Sijenense. Con este homenaje, el Instituto de Estudios Sijenenses honró la labor de Lavilla y su trabajo incansable durante 25 años por y para la institución.
