La Audiencia Provincial ha ratificado este lunes el fallo del juzgado de Instrucción número 2 de Huesca que ordena la vuelta de las pinturas murales de la sala capitular del monasterio de Sijena, desestimando los recursos interpuestos por la Generalitat y el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC), donde siguen expuestas.
Las pinturas murales, que fueron arrancadas en 1936, en plena Guerra Civil y sin permiso de las autoridades competentes, son el principal tesoro artístico del Sijena. La resolución acerca su vuelta, aunque todavía queda una instancia más, el Tribunal Supremo, al que seguro recurrirán las instituciones catalanas. Para ello, disponen de 20 días.
La sentencia del juzgado oscense, que fue dictada el 4 de julio de 2016, ya dejaba claro que el MNAC «nunca ha poseído las pinturas a título de dueño» y además, señalaba que su arranque, que fue llevado a cabo por el catalán José Gudiol, «no sólo no contó con el consentimiento de las religiosas, legítimas propietarias de las obras, sino que tampoco hubo ningún tipo de resolución administrativa del órgano competente, la Dirección General de Bellas Artes».
El abogado del Ayuntamiento de Villanueva de Sijena, Jorge Español, realiza una valoración «muy positiva» de la sentencia y además, se muestra «optimista», ya que considera que es «prácticamente imposible o, al menos, muy difícil» que el Tribunal Supremo revoque este doble fallo.
«Es un paso muy importante y ahora, lo que necesitamos es que el Gobierno de Aragón planifique el traslado e instalación de las pinturas en la sala capitular, con el asesoramiento de varios expertos y la elaboración de un pormenorizado plan», señala el letrado.
Igual de «satisfecho» se ha mostrado el alcalde de Villanueva de Sijena, José Jaime Castellón, con el fallo emitido por la Audiencia Provincial. «Estoy muy contento, como representante del municipio y como aragonés, ya que es un paso fundamental para recuperar las pinturas y devolver su esplendor al monasterio de Sijena», ha dicho.
Ante la seguridad de que el pleito llegue al Supremo, el primer edil ha señalado que «habrá que seguir luchando, ya que las pinturas deben volver al lugar del que forman parte y del que nunca debieron salir».