El Festival Internacional de la Oralidad de Robres se despide este viernes con una original y atractiva propuesta, una cena-espectáculo en torno a la figura del protagonista del último y exitoso montaje de la compañía local, el Bandido Cucaracha.
La cena estará basada en platos típicos del siglo XIX, es decir, de la época en la que vivió Mariano Gavín Suñén y salpicada con diferentes números teatrales. A través de los mismos, los comensales conocerán la historia que hay detrás de cada plato. Todos guardan relación con el día a día del popular bandolero o con alguno de sus coetáneos, ya sea su amada Jobita, el adinerado Juan Ruata o alguno de sus compinches. Por ejemplo, se servirá un guiso de cordero y patata, el mismo que los días de fiesta se elaboraba en Casa Ruata, y, como postre, ricos farinosos de Robres, utilizados en su día por Zerrudo, junto a un buen vino, para sonsacar el nombre del verdadero asesino del cura de Candasnos.
Aunque estaba prevista para 80 personas, los organizadores han apurado al máximo el espacio disponible y han ampliado el aforo hasta las 105 personas. Tras la cena, y con un montaje diferente al original, el Teatro de Robres representará la obra sobre El Cucaracha, lo que permitirá la entrada de otras 200 personas.
Todo está listo en un marco espectacular, el exterior del Museo Etnológico de Julio Maza, donde ha sido instalado el escenario y dispuestas las mesas.
La cena-espectáculo será la guinda al éxito de esta nueva edición del Festival Internacional de la Oralidad de Robres, que, según explica su director, Luis Manuel Casáus, deja un balance “más que positivo”. “En primer lugar, el tiempo ha acompañado, lo que es esencial cuando se organizan actos al aire libre; en segundo lugar, hemos disfrutado de espectáculos de gran calidad; y en tercer lugar, la respuesta del público ha vuelto a ser maravillosa, llenando el aforo disponible función tras función, con una media de 250 espectadores”, señala.
El Festival Internacional de la Oralidad Villa de Robres arrancó con el show ‘Fabiolo Connection’ a cargo del actor Rafa Maza. El monegrino, que tiene sus raíces familiares en Tardienta, conquistó al público, a través de su personaje más popular e irreverente. También resultó espectacular el ‘Circo Jotero’ de Noche Dieguez y Javier Franco o la puesta en escena de ‘Doña Rosita la solterona’ a cargo de la compañía Trece Gatos Teatro (Madrid). Tras ello, llegó el concierto dramatizado de la Orquesta de Pulso y Púa de Almudévar y después, la representación de la compañía Espantanublos Teatro.