La firma ha tenido lugar este viernes en el salón de actos del ayuntamiento.
La Comunidad de Regantes Lasesa y el Grupo Forestalia han rubricado este viernes en Sariñena un convenio para impulsar la plena compatibilidad entre los parque eólicos proyectados en la zona con las actividades e infraestructuras agrícolas y de riego.
El acuerdo alcanzado llega tras un año de negociaciones y después de que los agricultores monegrinos presentaran alegaciones a los anteproyectos impulsados por el grupo Forestalia. En total, se trata de cuatro parques eólicos que suman 198 megavatios de potencia procedentes de 36 aerogeneradores y que están pendientes de ser autorizados por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
El pasado 10 de noviembre la Junta General de la Comunidad de Regantes, la mayor de la provincia oscense, con 9.700 hectáreas y casi 500 propietarios, aprobó por amplia mayoría el contenido del documento que ha sido rubricado este viernes en el salón de actos del ayuntamiento de Sariñena entre el presidente de Lasesa, Fernando Regaño, y el responsable del Grupo Forestalia, Fernando Samper. También han asistido miembros de la corporación municipal, entre ellos, el alcalde de la capital monegrina, Juan Escalzo.
Compromiso de coordinación y transparencia
El convenio recoge el compromiso de colaboración, coordinación y transparencia informativa en todas las fases de desarrollo de los proyectos, desde su planificación hasta la construcción y posterior operación. En el diseño de las implantaciones de los aerogeneradores se reducirán al máximo las afecciones a las unidades agronómicas.
En todo momento, Forestalia tendrán en consideración las propuestas y necesidades de la Comunidad de Regantes y de los propietarios afectados, desde la propia fase de diseño de viales y plataformas hasta los trazados finales de las líneas eléctricas. Durante la fase de explotación, se establecerán mecanismos para facilitar la convivencia de las actividades de regadío con las de operación y mantenimiento, mediante una adecuada planificación de las actuaciones. Forestalia también se encargará de realizar el mantenimiento y reparación de los viales, prestará asesoramiento en materia de energías renovables a la Comunidad, estudiará futuros proyectos sinérgicos con las infraestructuras que se desarrollen en la zona y promoverá módulos de servicios de recarga rápida de vehículos de uso agrario mediante electrolineras.
Según explican desde la comunidad de regantes, el convenio prioriza la operación y mantenimiento de las infraestructuras de riego y unidades agronómicas ya existentes y condiciona el diseño de las plataformas para los molinos así como el trazado de las líneas eléctricas enterradas de media tensión, debiendo «respetar la profundidad de forma que permita el laboreo de la tierra sin riesgo de interferencia con ellas».
Asimismo, el convenio establece una partida presupuestaria para costear a un técnico de la comunidad de regantes que tutelará el seguimiento de las obras al objeto de garantizar que se cumplan todos los puntos pactados entre Lasesa y Forestalia.
El convenio recuerda que la Comunidad de Regantes Lasesa está firmemente comprometida con el desarrollo de las energías renovables. De hecho, tiene en funcionamiento una planta fotovoltaica de autoconsumo de 1,7 megavatios (MWp), que
genera el 70% de la energía que consume la distribución de agua, “lo que demuestra nuestro compromiso con el sector de las renovables. Se ha logrado un acuerdo en el que se respetan las actuales infraestructuras de regadío, de forma que el impacto sobre nuestras explotaciones y su desarrollo futuro sea prácticamente nulo”, ha indicado su presidente, Fernando Regaño.
En su opinión, con la firma de este convenio “la producción de alimentos se ha priorizado a la generación de energía haciendo ambas compatibles”, en un momento en el que España se ha fijado como objetivo la neutralidad climática para el año 2050, en el marco del Plan Nacional de Energía y Clima 2021-2030 (PINIEC) aprobado por el Consejo de Ministros el 16 de marzo de 2021. En este contexto, los agricultores del regadío deberán dar respuesta a la creciente demanda de alimentos ante el constante incremento de la población mundial.
