La 22ª edición del Curso de Entomología Sanitaria y Control de Vectores se ha clausurado este viernes en la localidad de Grañén. De nuevo, el balance ha sido muy positivo, por el aprendizaje y por la experiencia vivida. A lo largo de esta semana, 20 personas procedentes de trece provincias españolas se han formado sobre entomología de la mano de 18 prestigiosos expertos en la materia.
Nélida Fernández, de la Universidad Alfonso X El Sabio de Madrid, ha asegurado que la iniciativa ha superado sus expectativas. «Para mí, su director, Javier Lucientes, es un referente, y además, otro investigador me habían recomendado el curso, que me parece imprescindible por el contenido así como por la calidad y diversidad de los docentes», ha dicho. «Me llevo actividades para mis estudiantes, nuevos amigos e, incluso, futuras colaboraciones», ha añadido.
A su lado, otra de las inscritas, María Sánchez, garrapatóloga y procedente de Cáceres, ha hecho un balance muy similar. «Me ha parecido una oportunidad única de ampliar mis conocimientos y además, poder aplicarlos en un futuro próximo. En especial, me han resultado muy interesantes las sesiones prácticas, donde hemos aprendido mucho sobre los métodos de captura, estudio y control, cuestiones que deberíamos aplicar en otras Comunidades», ha afirmado.
En el acto de clausura, junto al director del curso, el catedrático de la Universidad de Zaragoza, Javier Lucientes, han intervenido el presidente de la Comarca de Los Monegros, Pedro Loscertales, y el alcalde de Grañén, Carlos Sampériz. Ambos han agradecido a la Universidad de Zaragoza su apuesta por esta iniciativa que pone el foco en Grañén y en Los Monegros como referente de la Entomología. Además, han destacado la labor de Javier Lucientes, “alma máter” del curso, y también el trabajo de la co-directora, la bióloga Sarah Delacour, quien además forma parte del elenco de profesorado. Entre ellos también se encuentra Ángela Martínez, técnica de Monegros Servicios Medioambientales, la empresa pública comarcal que colabora de forma estrecha con el curso. Para Ángela Martínez y para el informático de la Comarca, Raúl Rivarés, quien trabaja antes, durante y después del curso para impulsar esta iniciativa formativa, también ha habido palabras unánimes de reconocimiento.
Además, Javier Lucientes ha destacado el excelente ambiente que ha reinado en el curso, al igual que en anteriores ediciones, «al que contribuye la hospitalidad que recibimos en Grañén todos los años». Para el catedrático, el factor humano es una de las claves del éxito, al tiempo que ha subrayado las sesiones prácticas de campo como uno de los elementos diferenciadores. «El servicio de control de plagas de Monegros Servicios Medioambientales de la Comarca de Los Monegros nos permite poder llevar al alumnado a lugares donde pueden ver sobre el terreno cómo se hace el seguimiento y control», ha explicado Lucientes.
De este modo, durante el curso han podido muestrear y ver técnicas de seguimiento de monitorización de garrapatas, así como control de mosca negra en el río y conocer el nuevo método de control mediante la liberación de machos estériles en el caso del mosquito tigre y otras especies invasoras vinculadas con zonas urbanas, donde hay que aplicar métodos diferentes a la fumigación con insecticidas. «Se trata de una buena herramienta para poder controlar las poblaciones de mosquitos invasores que lleva pocos años y está en fase de pruebas en España y se ha probado con éxito en zonas tropicales». Otro tema que ha tenido especial protagonismo este año han sido las garrapatas, «ya que cada vez son más frecuentes y causan más problemas», ha señalado Lucientes.
Todas las plazas cubiertas en minutos
Un año más, todas las plazas disponibles se llenaron en cuestión de minutos y ya hay lista de espera para la 23ª edición del curso. El alumnado es muy variado y ha estado formado por profesionales del ámbito sanitario, así como técnicos de empresas de control de plagas y de administraciones públicas.
Por su parte, la directora de los Cursos Extraordinarios de la UZ, Carmen Marta, visitó Grañén durante esta semana y señaló que se trata de «un curso histórico para la Universidad de Zaragoza, que destaca por su calidad, exclusividad y por ser uno de los mejor valorados». Agradeció asimismo a Comarca de Los Monegros y Ayuntamiento de Grañén su colaboración y apoyo en la organización, así como a los responsables del curso.