El alcalde de Sariñena, Juan Escalzo, comparten la ilusión y ganas de sus vecinos de volver a disfrutar de las fiestas en honor de San Antolín. Asegura que el consistorio ha apostado por actos populares dirigidos a reunir a la gente en la calle y recuperar juntos la alegría. También detalla algunos de los proyectos municipales más destacados.
A unas horas del inicio oficial de las fiestas, ¿cuáles son las expectativas?
Las sensaciones son muy buenas. Hemos preparado unas fiestas similares a las vividas en 2019, con actos populares dirigidos a reunir a la gente en la calle y recuperar juntos la alegría. También hemos procurado una buena coordinación con el resto de colectivos, Peñas y Casino, con el fin de que no haya coincidencia de actos y la gente pueda acudir a cada una de las actividades. Después del largo parón, hay ganas de disfrutar y salir. Tenemos mucha ilusión y, como es normal, algunos nervios, ya que esperamos que todo salga bien y el tiempo acompañe. También es cierto que llegamos algo justos de fuerzas, ya que son muchos ya los actos celebrados y el esfuerzo invertido en su organización.
Han sido dos años muy duros. La residencia municipal de Sariñena fue una de las más golpeadas al inicio de la pandemia. ¿Qué motivó la elección de sus trabajadoras como pregoneras de San Antolín 2022?
La plantilla al completo realizó un esfuerzo titánico. Aún me emociona recordar la dureza de los momentos vividos y la entrega de todas ellas. Todos estuvimos de acuerdo en que eran merecedoras de este reconocimiento. Aunque hubo otros colectivos y efectivos que realizaron una gran labor, no queríamos generalizar, deseábamos enfocarnos en el trabajo y la entrega de aquellas que estuvieron día a día con nuestros residentes sin que eso signifique que el resto no lo merecieran.
¿Cuáles son los actos que con más ganas espera?
Lo tengo claro: el principio y el final. El día del chupinazo es especial. La gente ya se junta a almorzar y después, vive con mucha alegría la cabalgata, que tiene momentos de gran animación y armonía. Y, casi al final de las fiestas, hay otro acto muy especial, que se incorporó en 2019 y que creo que fue un acierto: la cena y verbena popular, que se hace entre Ayuntamiento, Peñas y Casino, con el ánimo de reunir a personas de diferentes generaciones y despedir juntos las fiestas. A mí es el acto que más me gusta y que más contribuye a hacer pueblo. En 2019, estuvimos 830 personas y en esta ocasión, esperamos rondar una cifra similar.
¿Qué mensaje le gustaría hacer llegar a sus vecinos?
La decisión de suspender las últimas fiestas fue difícil e impopular, pero necesaria. Ahora, solo deseamos que la gente las disfrute con ilusión. Hemos intentado hacer unas fiestas populares y dirigidas a todos los públicos.
A nivel municipal, ¿cuáles han sido los proyectos que más destacaría en este último año?
Dos han sido los principales: la reanudación de las obras de ampliación de la residencia municipal y la renovación del campo de fútbol El Carmen. Ambas se han llevado una parte importante del presupuesto municipal. En el primer caso, la inversión asciende a 1,2 millones de euros, de los que 500.000 euros son aportados por el Gobierno de Aragón y los otros 700.000 por el Ayuntamiento de Sariñena, donde se incluyen los fondos recaudados con la venta de las propiedades que varios usuarios de la residencia dejaron en herencia al consistorio con el deseo explícito de que sirvieran para completar las obras. El campo de fútbol El Carmen rozará los 500.000 euros, ya que, además de la renovación del césped, incluye la mejora de vestuarios e iluminación. Y todo sin perder de vista otras intervenciones menores así como importantes actuaciones de mantenimiento. El día a día ha sido intenso, con el acondicionamiento de calles, zonas verdes o parques. Aunque nunca se llega a todo, puedo decir que hemos acometido las obras más importantes y necesarias en estos cuatro años.
Aún quedan unos meses para finalizar la legislatura, ¿qué otras actuaciones forman parte de su agenda?
Todo está listo para dar continuidad a la primera fase de las obras de ampliación de la residencia municipal, donde se incluye el equipamiento, que ya está adjudicado, así como la mejora del antiguo edificio. Además, entre otras actuaciones, daremos prioridad a la renovación de la Plaza de España, que esperamos despejar de vehículos y reorganizar. El proyecto incluye una zona de aparcamiento en la calle Los Ángeles, que tendrá capacidad para 21 coches, así como el acondicionamiento de la propia plaza y las calles colindantes. La plaza se configurará a una sola altura y será peatonal, salvo una zona en la que se permitirá el aparcamiento controlado por tiempo. El objetivo es embellecer el centro del casco urbano, es decir, que la zona luzca y deje de estar repleta de coches. La inversión rondará los 200.000 euros.