Sariñena se ha convertido en un ejemplo de unión y solidaridad. Asociaciones, empresas y vecinos se han volcado con la residencia municipal, donde el pasado 22 de marzo se detectó un importante brote de coronavirus. A diario, el centro recibe todo tipo de obsequios, desde material de protección hasta postres caseros y de forma paralela, el consistorio va sumando donaciones económicas, que ya rozan los 10.000 euros.
Atendiendo a los criterios de la dirección de la residencia municipal, el dinero sirve para paliar diferentes necesidades, como la renovación y mejora del mobiliario. Así, como ejemplo más reciente, una parte importante ha ido dirigida a la adquisición de seis camas hidráulicas, que favorecerán el bienestar de los internos y, al mismo tiempo, la salud laboral de las trabajadoras.
Desde el inicio de la crisis del coronavirus, el consistorio ha recibido decenas de donativos, que van de los 50 a los 2.000 euros que de forma reciente ha entregado la Asociación del 50 Aniversario de Cartuja de Monegros. También han sido varias las empresas que en lugar de entregar dinero han optado por hacerse cargo de algunas de las facturas derivadas de la actividad del centro.
Los responsables municipales califican de «extraordinaria» la solidaridad y la colaboración demostrada por vecinos, empresas y asociaciones locales. «No hay palabras suficientes para mostrar nuestro agradecimiento», señalan.