El Descendimiento del Cristo de Castejón de Monegros es el acto más singular de cuantos se llevan a cabo en Los Monegros por Semana Santa. De hecho, la celebración se alarga durante todo el día, manteniendo la iglesia abierta para que los fieles puedan visitar el Monumento.
Así, a primera hora de esta mañana, los soldados de la cofradía de la Sangre de Cristo han acudido hasta la ermita del Hospital, dentro del casco urbano, donde han recogido al Cristo encamado, llevándolo en procesión hasta la iglesia, lugar en el que es mostrado durante gran parte de la jornada.
Son, precisamente, los integrantes de la cofradía los encargados de realizar otras funciones, como guardar el Monumento en turnos de una hora, así como el pregón, que ha tenido lugar a las 15.00 horas y en el que se han anunciado la muerte y entierro del Señor.
Una vez colocado el Cristo en la cruz, la iglesia se irá llenando de fieles, hasta las 22.00 horas, momento en el que tendrá lugar el esperado Descendimiento. La imagen, que es es articulada, permitiendo plegar sus brazos, será bajada de la cruz y después, ofrecida a la Dolorosa, que, a su vez, tiene la capacidad de cabecear y llorar, dotando la escena de gran realismo. Durante el acto, y pese a encontrarse la iglesia parroquial llena, hay un gran silencio y únicamente un foco ilumina la escena.
El acto suele contar con la participación de las niñas de la Primera Comunión, que, junto a los Soldados de la cofradía, guardan los elementos retirados del Cristo (la corona de espinas, el cartel y los clavos) e introducen la imagen en la cama sepulcral. Después se llevará a cabo la procesión por las calles del municipio.