El caballo se ha impuesto al hombre en el singular desafío organizado en la localidad de Lanaja. Y por partida doble. El equino ha vencido en la competición oficial, donde ha medido sus fuerzas frente a un equipo de seis relevistas, y además, ha sido el ganador de un reto final, introducido en el último momento y disputado a una única vuelta, en el que su rival ha sido el atleta Daniel Fuentes.
El desarrollo de esta singular prueba, que ha cumplido su edición número 23, ha acabado siendo diferente al ideado. En un principio, iban a competir dos caballos, a relevos y con un obstáculo. No obstante, la yegua se ha mostrado inquieta y para evitar contratiempos, los organizadores han decidido descartar su participación. También ha sido eliminada la paca de paja colocada en el circuito.
Así, y al igual que ocurrió en la última edición celebrada, la del 2019, Gábalo, un macho de capa castaña y raza centroeuropea, y su amazona, Carlota Izquierdo, han sido los elegidos para enfrentarse al equipo de relevistas. Y, por segunda vez consecutiva, han vencido. Y eso que ha habido emoción hasta el final.
El equipo de relevistas, que ha estado formado por tres hombres y tres mujeres, ha logrado ponerse por delante en la segunda vuelta y llegar a coger cierta ventaja, aguantando los envites del caballo, que los ha superado en los últimos metros. En total, han dado nueve vueltas. El público, que ha llenado el circuito, ha jaleado a unos y otros, aunque con preferencia sobre los corredores. Y es que los tres hombres eran monegrinos: Aitor Abadías y Saúl Gazol, naturales de Lanaja, y Javier Coscolla, de Sariñena. A ellos, se han unido tres destacadas deportistas del Club Scorpio 71: Andrea Merín, Anais Cazo y Alicia Leyra. Todos con gran proyección y un destacado palmarés.
Para darle todavía más emoción, al igual que cada año, el acto ha contado con la narración en vivo de Celedonio García, que, entre otros detalles, ha recordado que, de las 22 ediciones, 14 han sido para el caballo y 8 para el hombre.
Antes de comenzar, Carlota Izquierdo se ha mostrado “feliz” de poder contribuir al mantenimiento de un desafío que se remonta al año 1950, cuando el entonces alcalde de Lanaja, Jesús Abad, se apostó con el médico local, Serafín Gazol, a que el vencedor de la carrera pedestre sería capaz de ganar a un equino. La carrera se celebró y el caballo ganó.
Para los corredores locales, también ha sido un “orgullo” poder unirse a una celebración “tan especial, que siempre he visto desde fuera y que ahora viviré desde dentro”. “Me hace mucha ilusión”, ha señalado Saúl Gazol, justo antes de comenzar la carrera.
Los relevistas han reconocido salir “a por todas”. Y lo han hecho, plantando batalla al caballo, que ha tenido su único punto débil en la salida y en las curvas, lo que los corredores ya veteranos sabían que debían aprovechar. “Solo allí podemos conseguir algo de ventaja”, ha señalado una de las atletas, Anais Cazo, que participaba por tercera vez, con una victoria y una derrota sobre el equino.
Por si alguno tenía ganas de más, ha sido introducido un reto final, donde otro veterano atleta de esta prueba, Daniel Fuentes, ha retado al caballo a una única vuelta. Para tratar de igualar fuerzas, ha salido desde la entrada a la segunda vuelta y además, ha vuelto a ser colocado el obstáculo inicial. Trabas insuficientes ante la potencia del animal, que esta vez ha tenido que exprimirse al máximo para alcanzar al corredor y ganarle la partida en la recta final.
Daniel Fuentes, que ha formado parte del equipo de relevistas en cinco ediciones, sabe lo que es ganarle al caballo. De hecho, lo consiguió, junto a sus compañeros, en cinco ediciones. “Siempre es maravilloso formar parte de una prueba tan especial”, ha señalado el atleta.
Las mairalesas, junto a sus acompañantes, han sido las encargadas de dar la salida a la prueba, que, al igual que cada año, ha formado parte de las fiestas patronales en honor de San Mateo y ha tenido lugar justo después de la carrera pedestre. El alcalde del municipio, Gerardo Castillo, ha hecho entrega de los trofeos.