Endesa ha finalizado los trabajos de construcción de una nueva línea de distribución en el entorno de la localidad oscense de Grañén. La actuación ha contado con una inversión de 125.000 euros y servirá para mejorar la calidad de suministro en los núcleos de Callén, Piracés, Albero Alto, Albero Bajo y Grañén.
Los trabajos realizados han consistido en la construcción y puesta en servicio de una nueva red aérea de media tensión, a 15 kilovoltios, de 3,5 kilómetros de longitud, que servirá de cierre entre dos líneas dependientes de las subestaciones transformadoras Huesca Este y Grañén. También se ha instalado, en la interconexión de este nudo, un nuevo seccionamiento y los elementos y sistemas de protección, control y telemando asociados.
La actuación, que supone una mejora directa de la calidad de suministro para 500 clientes de la zona, va a servir para aumentar la seguridad y la fiabilidad de las instalaciones, asegurar su operatividad y minimizar el tiempo de reposición en caso de incidencia. Contribuirá también a mejorar la capacidad y rapidez de respuesta ante posibles averías.
Las acciones realizadas suponen la continuación de una serie de inversiones efectuadas a lo largo de pasados ejercicios y forman parte del programa de mejora de instalaciones desarrollado anualmente por Endesa con el objeto de consolidar la calidad de servicio y adaptarse a la evolución de la demanda.