Francisco Villellas jura su cargo como alcalde de Sariñena.
Francisco Villellas es el nuevo alcalde de Sariñena, tras salir adelante la moción de censura que los grupos municipales PAR, PP y CHA han promovido contra Juan Escalzo, del PSOE que, junto a sus cuatro concejales, ya ha pasado a la oposición. Para el nuevo primer edil, será su tercer mandato, después de los ejercidos entre los años 2011 y 2019.
La entrega del bastón de mando ha sido ejemplo de la tensión del pleno, sin apretón de manos ni pose ante las cámaras. También se han producido interrupciones procedentes del público, que ha llenado el salón de plenos, al que han acudido altos cargos de los partidos implicados, entre ellos, Elisa Sancho, Darío Villagrasa y Fernando Sabés, del PSOE; Gerardo Oliván y Celsa Rufas, del PP; o Alberto Izquierdo, del PAR. Por parte de CHA, han asistido Miguel Jaime, vicesecretario de Política Territorial, y Ruth Pina, vicesecretaria de Comunicación.
La denuncia ante la Fiscalía del caso del exinterventor municipal y padre del concejal de CHA, Salvador Ariste, por el presunto cobro irregular de varios complementos, ha marcado la sesión plenaria, que ha resultado bronca y agria debido a la agitación política vivida las últimas semanas en la localidad.
Juan Escalzo ha subrayado que «aquí solo hay un motivo para llegar a esta moción de censura: motivos personales de los tres. La presión de un partido político, CHA, y el oportunismo de los otros dos. Un pacto contra natura». En su opinión, «está claro que si no es con una moción de censura a este equipo de gobierno no lo paráis». «Somos -ha añadido- gente trabajadora y luchadora, y hemos demostrado que lo que decimos lo hacemos». Además, el socialista ha querido dejar claro que «denunciar un cobro irregular de un trabajador no es un ataque personal ni a la CHA, sino una irregularidad que hay que denunciar, sea quien sea», preguntándose qué hubiera pasado si el trabajador afectado por el expediente hubiera sido otro y lanzando una pregunta a los nuevos socios del equipo de gobierno, «¿podéis decir hoy aquí delante de todos que vais a defender los intereses del ayuntamiento y traeréis al pleno municipal la revisión de oficio de las nóminas? El expediente ya está iniciado, pero eso quedará en manos del próximo equipo de gobierno, ¿lo haréis?».
A esta cuestión ha respondido el nuevo alcalde, Francisco Villellas, señalando: «la Ley hará su función y el nuevo equipo de gobierno colaborará para que los hechos se aclaren cuanto antes». Siguiendo con los motivos de la moción de censura, Villellas ha insistido en que «es una solución» cuando se llega a «una vía muerta; sin posibilidad de sacar presupuestos, con un gasto corriente galopante, sin transparencia, sin información, con ataques personales e intereses propios». A ello, y ya como alcalde, ha añadido que la moción de censura no estaba entre sus planes, pero que la reunión con sus actuales socios de gobierno renovó su ilusión y ganas por sacar adelante obras y proyectos demandados durante años por la población de Sariñena. «Nuestro objetivo es que Sariñena vuelva a ser un pueblo vivo: con los museos abiertos, las asociaciones funcionando, tres ferias, certamen de jota, triatlón de San Juan y tantas cosas perdidas que hacían del municipio el motor de los Monegros. Es hora de trabajar con seriedad y transparencia, contando con las asociaciones, trabajadores del ayuntamiento y vecinos, para todos juntos hacer una Sariñena mejor».
Juan Escalzo entrega el bastón de mando a Francisco Villellas.
El portavoz del PP, Valeriano Tella, ha insistido en los mismos argumentos a la hora de defender la moción, señalando que «nada tiene que ver con el expediente del exinterventor y tiene todo que ver con su intento de secuestro de la voluntad de este pleno», refiriéndose al hecho de que se intentara impedir su participación y la del edil de CHA en la votación del pleno de presupuestos, que significó la ruptura del pacto de gobierno entre socialistas y nacionalistas. El concejal del PP también ha querido destacar la generosidad con la que los tres grupos «hemos adquirido este compromiso, sin ningún interés personal; sin hablar de sueldos sino de proyectos y de futuro para Sariñena», recalcando tener «un pacto que no va de derechas ni de izquierdas, va de respeto entre las personas que lo formamos, va de trabajo, y va de compromiso por Sariñena».
En su intervención, y a través de una amplia cronología, el concejal de CHA, Mascún Ariste, ha explicado el origen de su distanciamiento con el PSOE, desvinculándolo del expediente de su padre y ligándolo a una suma de acciones dirigidas a «anular» su actividad como concejal. Ha explicado que se le presentó un presupuesto ya elaborado, sin posibilidad de aportar y sin dinero en sus áreas. «Una moción de censura suele ser traumática, pero es legal y democrática, lo que no es democrático ni legal es la manipulación de actas, falsedades, ilegalidades, deslealtades, mentiras, conspiraciones y malas artes», ha dicho. «Primero se te acoge con mucho cariño y luego se te destroza a ti y, si es necesario, a tu familia. Y eso no es bueno para la democracia, ni para la convivencia. Eso se resiente en el ayuntamiento y, por tanto, en nuestros pueblos. Volvamos a la senda de la normalidad y la cooperación», ha esgrimido el edil, que ha vinculado la moción con su decisión de votar en contra de los presupuestos.
Declaraciones de los grupos políticos
Al finalizar el pleno, y con el precedente de la moción de censura de Biescas, donde ocurrió casi lo contrario, el portavoz del Partido Aragonés en las Cortes de Aragón, Alberto Izquierdo, ha declarado que «la diferencia» entre ambas mociones es que «en Biescas hay dos tránsfugas que el PSOE ha utilizado para llegar a la alcaldía y en Sariñena, no hay ningún tránsfuga, los tres partidos políticos mantienen su representación y sus representantes siguen siendo absolutamente leales y legales con su partido». «Los tres partidos, PAR, PP y CHA, desde sus direcciones, hemos avalado esta circunstancia. Qué extraño que a un partido como el PSOE le parezca mal una moción de censura legítima y sin ningún tránsfuga y, sin embargo, no les parecía mal en Biescas quitarle la alcaldía al PAR con tránsfugas», ha insistido Izquierdo.
Frente a ello, el líder de los socialistas en el Alto Aragón, Fernando Sabés, ha tachado la moción de «injusta». A su juicio, «se trata de un pacto contra natura y por intereses personales». «Las mociones de censura son democráticas, y el PSOE es un partido democrático, y la respetamos, pero es una moción que a quién no va a beneficiar es a los vecinos y vecinas de Sariñena», ha subrayado, respaldando además «el trabajo, esfuerzo y dedicación de Juan Escalzo y todo su equipo, que seguirá trabajando por el bien de todo Sariñena, y no por intereses personales».
Y, por su parte, otro de los representantes destacados, Gerardo Oliván, del PP, ha señalado que «hoy se ha constatado que el PSOE ha sido incapaz de gestionar esas mayorías para aprobar unos presupuestos, y la lógica municipal y la forma de trabajar es plantear otra alternativa, que en este caso lo plantean los tres partidos políticos que han presentado la moción. Lo que van a tener que hacer es trabajar para sacar adelante los presupuestos. El pacto PP-CHA el PSOE lo utiliza torticeramente, aunque son maestros en pactos anti-natura. En ayuntamientos pequeños y pequeños municipios hablamos de personas, y no de partidos».
