Los mayores destrozos del paso de la DANA están fuera de los núcleos urbanos, con caminos rurales destrozados por las fuertes tormentas caídas sobre municipios como Sena, Castejón de Monegros, Castelflorite o La Almolda. De ahí surgió la crecida del barranco de la Valcuerna, especialmente preocupante a su paso por Peñalba, donde el caudal ya ha bajado y la situación está controlada.
En Sena, como ejemplo, su alcalde, Javier Felipe, calcula que solo en la red de caminos los daños estarán entre los 20.000 y los 30.000 euros. En esta localidad, las tormentas dejaron 70 litros por metro cuadrado en unos 40 minutos, llegando a causar inundaciones además en una docena de viviendas así como filtraciones en varios edificios municipales. De forma temporal, también fue necesario cortar el tráfico en la travesía de la A-131 y en la A-1217 hacia Castelflorite. «Los daños son muy importantes. El agua ha destrozado muchos caminos, ha tirado muros de piedra… los principales daños están en los que dan acceso al monte y los situados en la zona del Vedado. También ha sufrido importantes afecciones el camino del barranco de la Clamor», ha señalado Felipe. Ahora mismo, las labores se centran en la limpieza del casco urbano, a la espera de poder evaluar los daños en la red de caminos e iniciar de inmediato su reparación.
La misma situación se repite en Castejón de Monegros, cuyo término municipal registró algunas de las precipitaciones más importantes. De hecho, en una vaguada, lindando con la zona de Jubierre, se llegaron a recoger más de 100 litros por metro cuadrado, justo donde nace el barranco de la Valcuerna. Manuel Dupla, vecino de esta localidad, fue testigo directo de la fuerte tromba de agua, que lo pilló en su explotación. «Tuve que salir en tractor. No había otra forma, ya que el agua alcanzó enseguida el metro de altura y antes de irnos, ya habían caído más de 90 litros», ha explicado. Por suerte, su rebaño estaba recogido en la paridera, situada en una zona alta. No obstante, el agua arrastró gran parte del vallado exterior. «Hay una parte tumbada y el resto ha desaparecido. Se lo llevó el agua», ha explicado. En este municipio, son numerosos los caminos destrozados, muchos de ellos recién arreglados, según ha detallado su alcaldesa, Ana Puey.
Peñalba recupera la tranquilidad
Tras varias horas pendientes de la evolución del cauce del barranco de la Valcuerna, Peñalba ha recuperado la tranquilidad. La infraestructura, de 6 metros de profundidad, llegó a desbordarse este pasado miércoles en su tramo final y el agua alcanzó varias viviendas, aunque sin graves consecuencias gracias a los diques de arena creados frente a ellas. También otros vecinos colocaron ladrillos y tableros de madera en las puertas de sus casas, que han podido retirar este jueves al quedar la situación controlada.
«Tengo 52 años y nunca había visto algo igual. Tras la construcción de la nueva canalización del barranco, de gran capacidad, nunca habíamos estado tan cerca de un desbordamiento. De no haber existido, el agua hubiera llegado a la plaza del pueblo», ha señalado este jueves el alcalde del municipio, Roberto Saurat. «Ahora, ya está todo tranquilo, a la espera de ver los destrozos que el agua ha podido causar en los campos y caminos», ha añadido.
El presidente de la Comarca de Los Monegros, Armando Sanjuan, tiene previsto recorrer este viernes algunas de las localidades más afectadas por la DANA.