La Renta Agraria Aragonesa ha aumentado en el último año en 240 millones de euros para pasar de 1.982 millones de euros en 2022, a 2.222 millones en 2023. Supone un incremento del 12,10%, alineado con el crecimiento de la Renta Agraria en el conjunto de España, que fue del 12,82%. Así se recoge en el informe de Macromagnitudes Agrarias de 2023 elaborado por el Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación del Gobierno de Aragón y que se ha presentado este jueves.
La Renta Agraria analiza la rentabilidad del sector, es decir, representa el valor generado por la actividad de la producción agraria. Cuantifica la remuneración de los de los factores de producción (tierra, capital y trabajo).
Su cálculo, en línea con el Sistema Integrado Europeo de Cuentas Nacionales y Regionales (SEC-2010), se basa en información de producciones y precios, recopilada a través de las operaciones estadísticas que se realizan desde el Departamento, en virtud del Convenio anual establecido con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). También se utilizan los datos relativos a servicios agrarios, consumos intermedios, amortizaciones, impuestos, recopilados por el MAPA para la elaboración de Cuentas Económicas de la Agricultura estatales.
La Renta Agraria se obtiene tras calcular el Valor Añadido Bruto (VAB) del sector, que es el resultante de obtener la totalidad de la Producción Final Agraria y restarle el total de los gastos externos necesarios para poder desarrollar dicha producción. A esa cantidad, se le añade la cuantía de las subvenciones no ligadas a la producción, y se le resta el conjunto de amortizaciones e impuestos.