Un total de 24 efectivos de la UME (Unidad Militar de Emergencias) de Zaragoza ha trabajado este viernes en la desinfección de los espacios comunes de la residencia Monegros de Grañén, donde el pasado fin de semana fue detectado un importante brote de coronavirus, que, según fuentes del propio centro, alcanza a 30 de sus internos así como a varias de sus trabajadoras.
El equipo desplazado ha invertido alrededor de una hora en la limpieza de cada una de las superficies de diferentes espacios como la recepción, los salones, pasillos o cuartos de limpieza. Además, dos de los militares, equipados con trajes de protección, ha accedido a las zonas más sensibles. Todo con el objetivo de acabar con la cadena de contagios y prestar ayuda ante la delicada situación.
En este caso, las labores de la UME se han ceñido a la desinfección, tras comprobar que los responsables del centro habían seguido todos los protocolos y procedido de la forma correcta a la sectorización del mismo, reubicando a los residentes con el fin de separar a positivos y negativos.
La aparición de este brote ha coincidido con el repunte de casos registrado en la zona de salud de Grañén, donde este viernes el número de nuevos contagios ha caído respecto a las últimas jornadas, con tan solo 5 positivos más. No obstante, en lo que va de mes, 222 casos, que han derivado en el fallecimiento de 5 personas, según los datos del Gobierno de Aragón.