A través de los fondos del Plan para la Recuperación de la Sierra, han sido realizadas mejoras en dos de las antiguas parideras de ganado situadas en el municipio de Robres. Las actuaciones han consistido en la instalación de mobiliario de obra (mesas y bancos) y hogares de leña, con el ánimo de que los vecinos tengan la oportunidad de reunirse en estas construcciones y disfrutar de comidas campestres.
En total, han sido dos las parideras acondicionadas, aunque una de ellas es muy amplia y dispone de dos espacios diferenciados. Los trabajos, que han supuesto una inversión de 45.000 euros, han finalizado y por lo tanto, aquellos que lo deseen ya pueden disponer de forma libre de estas edificaciones que en su origen se destinaban a la recogida y protección del ganado. El objetivo era evitar el desplazamiento diario de los rebaños. También se usaban para pernoctar en época de siembra y siega.
«Actualmente, la gran mayoría está en desuso y únicamente, hemos dejado una de ellas sin amueblar, ya que de forma muy puntual es utilizada por algún ganadero», según ha explicado la alcaldesa del municipio, Olga Brosed. Las nuevas inversiones, que completan a las mejoras llevadas a cabo en estructuras y tejados, permiten dar una nueva vida a estos espacios y, al mismo tiempo, conservar un elemento que forma parte de la historia del municipio.
Según detalla la primera edil, el fondo dirigido a la recuperación de la sierra se nutre de los ingresos derivados de las actividades que se desarrollan en esta zona, incluido el parque eólico. Su gestión es compartida por el Ayuntamiento y el departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón.