El Ayuntamiento de Sariñena ha completado la urbanización de tres calles: Baltasar Garcián, Alberto Ballarín y Florencio Ballarín. Todas ellas están situadas en una zona de expansión del municipio en dirección hacia el polígono Saso Verde.
Las obras han supuesto una inversión de 100.000 euros, de los que 80.000 han sido financiados a través del Plan de Obras de la Diputación Provincial de Huesca de 2019 y el resto, aportados por el consistorio.
La siguiente gran actuación que se realizará con estos fondos ya está decidida y será el cambio del sistema de captación para el agua de boca, lo que permitirá cumplir con una de las principales reivindicaciones de la población. De hecho, el municipios se ha quedado en varias ocasiones sin agua potable debido a la turbidez o directamente, a la presencia de diferentes tipos de plaguicidas.
En la actualidad, Sariñena se suministra de la acequia Valdera, que discurre a cielo abierto y además, presenta una mala cimentación, lo que conlleva el arrastre de tierra así como de otras sustancias. A través de las obras previstas, sin perder este suministro, se realizará un cambio de captación, sustituyendo la acequia Valdera por las infraestructuras del sector XI. La toma ya está lista y únicamente, resta la canalización hasta la balsa, que supondría una coste de alrededor de 400.000 euros.
«Se trata de una actuación muy necesaria, a la que tendremos que destinar fondos propios, con el fin de conseguir un agua de calidad y acabar con el problema actual. Hablamos de una cuestión que afecta a la salud de la población y por lo tanto, ineludible», señala el alcalde de Sariñena, Juan Escalzo.