Villa de ferias y mercados desde la edad media, y motor industrial de la zona, la localidad desarrolla su vida a orillas del Alcanadre y Flumen, sin perder de vista la laguna, uno de los mayores humedales del país.
Con ejemplos destacados de arquitectura civil, como el Casino, la casa Penén-Paraled o la Casa la Miguela, que acoge el museo, además del recientemente restaurado torreón de los Foces, único vestigio visible de la antigua muralla, en su casco antiguo se salpican los ejemplos de arquitectura popular y las fuentes, vestigio de una vida anterior.
Orgullosa de su dance, el más antiguo y mejor conservado de Aragón y reconocido como Fiesta de Interés Turístico de Aragón, junto con el de Sena, es también cuna de gaiteros, como Vicente Capitán o Martín Blecua, además de grandes voces de joteros, agrupados en torno a la formación Aires Monegrinos. Pero no sólo en folclore es intensa la actividad, también la cultura: tertulias, encuentros, charlas, presentaciones… los eventos discurren de manera continua.
Si algo define el carácter actual de Sariñena es su espíritu ferial y comercial, heredado desde hace siglos y mantenido hoy como cabecera comarcal. A FEMOGA, una de las ferias referentes de Aragón, se han ido sumando otras en los últimos años con el objetivo de dinamizar su espacio ferial y convertirse en un motor de eventos. Por su parte, el comercio tradicional y de servicios se conjuga con grandes e innovadoras industrias, con el ojetivo de dinamizar el territorio a través de los servicios.