La alcaldesa del municipio, Esther Soler, en el piso de la casa del médico, en el que resta una segunda fase.
El Ayuntamiento de Sena avanza en su apuesta por fijar población con la puesta en marcha de dos nuevas viviendas en alquiler. Por un lado, está en plena rehabilitación de la casa del médico, de titularidad municipal, y por otro, ha obtenido el alquiler social de la antigua vivienda del párroco.
A través del Plan de Eficiencia Energética de la Diputación Provincial de Huesca, el consistorio ha completado ya la primera fase de la casa del médico, que está situada justo encima del consultorio médico, muy cerca de la plaza principal de la localidad. La actuación ha permitido renovar la instalación eléctrica, la red de agua, el tejado y la terraza, además de distribuir los espacios interiores.
El inmueble, que cuenta con cuatro habitaciones, salón, cocina y baño, será objeto de una segunda fase. Se llevará a cabo la instalación de techos y suelos, y los equipamientos, es decir, el amueblamiento del baño y la cocina, dejando listo el piso para su alquiler. El inmueble ha quedado preparado además para la posible instalación exterior de un montacargas.
La inversión de las dos fases ronda los 90.000 euros. «La falta de vivienda en el medio rural es un problema real. Con esta actuación damos respuesta a la demanda existente y facilitamos que más personas puedan establecerse aquí», ha explicado la alcaldesa de Sena, Esther Soler. De hecho, ya son varias las personas que han mostrado su interés.
Imagen del exterior de la casa parroquial.
Vivienda del párroco
Por otro lado, una vivienda que podrá ocuparse de inmediato es la antigua casa del párroco. En este caso, el Ayuntamiento y el Obispado han firmado un acuerdo de alquiler por 40 años, con la condición de que se destine a alquiler social, es decir, dirigido a familias o personas en situación de vulnerabilidad.
La intervención en este piso será mínima, ya que se encuentra en buen estado, y se limitará a reparar unas goteras en el tejado y sustituir dos ventanas, según ha detallado la primera edil. Además, el Ayuntamiento se encargará únicamente de aportar la fianza del contrato, mientras que el dinero del alquiler se repartirá entre el consistorio y la junta parroquial, lo que permitirá que la inversión y los beneficios se queden en el municipio.
«Con esta actuación, conseguimos otra vivienda abierta y además, el dinero se queda en el pueblo», ha destacado Soler. La actuación se llevará a cabo de forma inmediata y por lo tanto, permitirá la llegada de nuevos inquilinos.
A través de estas dos iniciativas, Sena refuerza su oferta de vivienda en alquiler y contribuye a la dinamización del medio rural, apostando por facilitar la llegada de nuevos vecinos y la fijación de población.
