A esa frase tan propia del dance: “aprieta el codo gaitero y que suene el tarirán”, han respondido este domingo tres nuevas integrantes del grupo de Sena. Por primera vez, y demostrando que la cantera musical de la localidad sigue creciendo, Marian Pellicer, Vera Villafaina y Clara Sesé han participado con sus gaitas en la actuación central dedicada a la Virgen del Rosario. También ha sido día de estreno para varios volantes.
Para las tres gaiteras, la jornada de este domingo ha sido especial, ya que anhelaban poder sumarse a este ancestral entramado festivo, que está declarado Fiesta de Interés Turístico de Aragón, al estar entre los más antiguos, completos y mejor conservados de la Comunidad. Al lado de las nuevas gaiteras, ha estado su mentora, Nuria Montul, elegida además como mantenedora de las fiestas patronales de Sena, por su contribución a la conservación y difusión de las tradiciones locales. También por su buen hacer transmitiendo a las nuevas generaciones su pasión por la música.
«Para mí, es todo un honor contribuir a que nuestro pueblo siga contando con una amplia cantera de músicos», ha señalado Montul, «orgullosa» de cada uno de sus pupilos. Y son muchos. De hecho, las clases que inició hace menos de un año ya cuentan con alrededor de una veintena de alumnos de gaita y dulzaina. La joven, que es pianista de profesión, se inició en la gaita de la mano de los hermanos Plana, Carlos y Eduardo, integrantes del dance.
«Hemos crecido escuchando la gaita y viendo a los danzantes; y queríamos formar parte de ello», ha explicado Marian, de 11 años, que, junto a otro de los alumnos de la escuela local, Alejo Villafaina, ya formó parte de las tradicionales coplillas de Semana Santa. Para él, el estreno ha sido doble, ya que, además de tocar la gaita en algunas piezas de la actuación, ha formado parte de los nuevos cuadros de volantes.
Tras el obligado parón, el dance de Sena ha rebosado salud en su vuelta. Al son de la gaita de boto, sus integrantes han interpretado varias mudanzas, en su mayoría vigorosas y alegres, de rápido paloteo, que han arrancado los aplausos de los numerosos asistentes. También han completado La Rueda, una de las más esperadas, al incluir el ascenso de los volantes sobre los hombros del resto de componentes. Asimismo, ha tenido lugar la pastorada entre el rabadán y el mayoral y por supuesto, la lucha entre moros y cristianos, que ha contado con la participación de los generales de ambos ejércitos así como del Ángel y el Demonio.
Las risas han llegado además con las motadas, que han hecho alusión a las vivencias y anécdotas de los propios danzantes. Ha habido repaso de amoríos, crónica de sucesos y algún tirón de orejas al que llega tarde a los ensayos. Y todo en verso. Así, como ejemplo, el rabadán ha recitado: «en busca de la chiqueta te lanzaste a por el tercero/ no se alinearon los astros y te salió del mismo sexo».
También ha habido motadas a las nuevas gaiteras o al nutrido grupo de mairalesas, a las que han animado a mantener sus raíces y encarnar el futuro de Sena. A la Virgen del Rosario, los danzantes le han pedido que evite nuevas pandemias y reparta salud y trabajo.
Antes de la representación, ha tenido lugar la procesión y la misa, que ha incluido la ofrenda de flores y la participación de la coral de Sena. Al alba, los vecinos han entonado además las tradicionales coplillas y después, el Rosario de la Aurora. El mismo esquema se repetirá este lunes, aunque en honor de su segundo patrón, el Santo Ángel Custodio. Los danzantes cambiarán sus mudanzas y además, en lugar de motadas, habrá dichos dedicados a la actualidad municipal y a las anécdotas vecinales.