Programas originales, carteles y portadas de diarios componen la muestra.
El cafetín de la Pastelería Trallero acoge la exposición “125 años de fiestas de Sariñena”, un repaso por la evolución de la programación de los festejos de San Antolín en la capital monegrina desde el último tercio del siglo XIX hasta comienzos del XXI. En este periodo, las celebraciones sólo se han suspendido en tres ocasiones, y siempre por motivos de fuerza mayor: una gran tormenta de pedrisco que destruyó todas las cosechas (en 1899), la guerra civil (1936 y 1937) y la pandemia de Covid-19 (2020 y 2021).
La muestra parte de la colección particular de la investigadora sariñenense Gemma Grau, y cuenta con programas originales (el más antiguo, de 1888) que se complementan con carteles de festejos taurinos, de los actos del Casino, del Teatro Romea, la pista Rosaleda o el cine Victoria, todos desaparecidos en la actualidad. “Tendemos a pensar que antes no sabían divertirse, y la realidad es bien distinta” afirma Grau. “Hace justo cien años, en los años 20 del pasado siglo, las fiestas contaban con un concierto cada noche en una plaza diferente del pueblo, torneos de boxeo y pirotecnia, sin olvidar los actos religiosos, el dance, las carreras pedestres o la fiesta de la Jota que organizaba el Romea.”
El programa más antiguo data de 1888.
También aparecen nombres propios, como alguna de las primeras reinas de fiestas, o la mítica Orquesta Cobalto, que amenizó durante tres décadas los bailes en el Casino. “En realidad, las fiestas no han cambiado tanto, sólo han ido incorporando las modas y gustos de cada momento: si en los años 20 la música que sonaba era jazz, en los años 40 eran las cornetas y trompetas de la banda de Frente de Juventudes, y en los 2000, charangas como la de Grañén. Las fiestas han sido, y son, un arma de propaganda y una muestra de la sociedad de cada momento.”
La muestra, que se enmarca en las proximidades de las fiestas de la localidad, podrá verse del 1 de agosto al 30 de septiembre, en horario comercial.
